miércoles, 14 de abril de 2010
Pegame y Decime Lú
Yo quiero susurrarte todas mis fantasías, y que las tuyas al escuchar las mías euforicamente quieran hacerse carne y hueso. Como deseo que tus manos tersas se enreden con mis mechones de pelo, que tu aliento sea mio, y que cada uno de tus poros explote como un volcán en llamas. Desliza tu empapada lengua por mis anchas caderas y seguí y seguí, hasta perderte en mi infinito de piel y sudor. Noto como tu corazón ya casi no aguanta las palpitaciones tan intensas. Ja! pues imagínate entonces como se encuentran mis tripas luchando contra este semejante incendio.
Déjame probar un poquito de lo que tenes ahí escondido, déjame ver ese animal que disfrazas de ángel, esa bestia imposible de amaestrar. Quiero trepar tu cuerpo y enloquecerte con el ritmo de mi pelvis, que mis curvas te atrapen como una telaraña y no puedas parar. Mordeme, arañame, gemime al oido, grita mi nombre, nalgueame, tirame del pelo, apretame las tetas, volvete mi animal. Y quizás si podes poneme la piel de gallina, o hacerme desaparecer de la tierra por un instante, entonces te prometo que esta ocasión jamas se quitara de tu memoria.
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